Dos artistas, dos genios y un pequeño pueblo de la Costa Brava, Cadaqués.
Hace tres años hice un pequeño viaje por el noreste de la península descubriendo lugares como Roses, Empurriabrava, Girona, Cap de Creus…y Cadaqués.
Cadaqués es un pueblo pesquero situado en la provincia de Girona que no llega a los 3000 habitantes. Aún así, es un pueblo especial, con sus hoteles de encanto, su casco antiguo y sus restaurantes y tiendas.
¿Qué tiene además de especial Cadaqués? Pues que fue el lugar escogido por Salvador Dalí para pasar largas estancias con su mujer, Gala. Hablar de la Casa museo Dalí nos llevaría una entrada entera de este blog, ya que la propia Casa museo es en sí misma una obra más del genial artista.
Cual fue mi sorpresa cuando paseando por el pueblo me encontré la siguiente placa.
Así descubrí que Pablo Picasso decide pasar allí el verano de 1910 junto a Fernande y un grupo de amigos. Deciden alquilar una casa a pie de mar y se cree que este verano en Cadaqués influyó en el desarrollo del cubismo de Picasso, corriente artística que apenas había surgido un par de años antes.
Por aquel entonces Picasso y Dalí no tenían relación ya que Salvador Dalí apenas contaba con 6 años de edad. Sin embargo, algo de este pueblo les atrajo a los dos en diferentes momentos de su vida. La calma que se respira y el mar que se adentra en el pueblo fueron dos factores clave para convertir a Cadaqués en fuente de inspiración de los dos mayores genios del arte contemporáneo.
Al hilo de esto, no quiero dejar de mencionar una exposición temporal que se puede ver en el Museo Picasso Barcelona hasta el 28 de junio. «Picasso -Dalí /Dalí- Picasso» explica el contacto que tuvieron a lo largo de su vida estos dos artistas. Extraigo íntegro el texto de la página Web del Museo:
Picasso ayudó a Dalí durante los primeros años de la carrera del joven artista y, en los años treinta, tanto Dalí como Picasso participaron en el proyecto surrealista. Ambos respondieron de forma simultánea a los horrores de la Guerra Civil con obras que escenificaban la angustia del drama humano. Después de la Guerra Civil, Dalí referenció y homenajeó a Picasso a través de su obra. A partir de los años cincuenta, el trabajo de los dos artistas confluiría de nuevo en la confrontación con los grandes maestros de la historia del arte y con Velázquez en particular.
Una pena que El vértice coruñés de Picasso se encuentre en la otra punta del país para poder disfrutar de esta maravilla, 😦